Salmos 51:17
Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado; Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.
Descubrí una verdad sorprendente:
La debilidad atrae a Dios,
Él no puede resistir a los que con
Humildad y sinceridad reconocen con
Cuánta desesperación lo necesitan.
El orgullo y la arrogancia no agradan a
Dios.Debemos humillarnos,reconociendo
Nuestros pecados y nuestras necesidad de
Ser limpiados por Dios..
Aleluyaaaa.. post por Victor Matias
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