El Plan de la Salvación se encuentra escrito
en el libro sagrado: La Santa Biblia
A lo largo de la Historia Dios escogió y utilizó a santos hombres
para poder transmitir su Revelación por escrito. Por este motivo la
Biblia representa la Revelación de Dios en forma escrita, donde
encontramos cómo es Él y cuál es su voluntad para con esta Humanidad.
«Los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo» (2ª Pedro 1:21).
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La Biblia enseña: |
♦ DIOS EXISTE ♦
«Dice el necio en su corazón: No hay Dios» (Salmo 14:1).
Hoy la existencia de Dios es reconocida por la mayoría de personas
que habitan este mundo. La propia creación apunta hacia la existencia de
un Dios sabio y todopoderoso.
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La Biblia enseña: |
♦ DIOS CREÓ AL HOMBRE ♦
«Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó» (Génesis 1:27).
Dios creó al hombre y lo puso en el huerto del Edén, y le dio un mandamiento: «Del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás» (Génesis 2:17).
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La Biblia enseña: |
♦ EL HOMBRE DESOBEDECIÓ EL MANDATO DIVINO ♦
«Comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él» (Génesis 3:17).
El mandamiento dado por el Creador constituía en sí mismo una prueba
decisiva, ya que el hombre no debía amar a Dios por obligación, sino en
forma voluntaria. Pero... el hombre desobedeció el mandamiento. «Y lo sacó Jehová del huerto del Edén» (Génesis 3:23).
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La Biblia enseña: |
♦ LA MALDAD EN EL CORAZÓN DEL HOMBRE ES MANIFIESTA ♦
«Por tanto, como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el
pecado la muerte, así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto
todos pecaron» (Romanos 5:12).
Por medio de Adán recibimos como herencia el estigma del pecado. Por
tal motivo nuestra naturaleza se encuentra caída. El ser humano vive
bajo la opresión del pecado, y la humanidad da buena muestra de ello.
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La Biblia enseña: |
♦ EL SER HUMANO VIVE SEPARADO DE DIOS ♦
«Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios» (Romanos 3:23).
Como resultado del pecado el ser humano nace separado espiritualmente
de su Creador, y así crece y camina solitario hacia la eternidad,
destituido de la gloria de Dios y privado de su entrada en el cielo.
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La Biblia enseña: |
♦ EL PECADO TIENE CONSECUENCIAS EN ESTA VIDA ♦
«La paga del pecado es muerte» (Romanos 6:23).
El hombre vive alejado de Dios y sufre las terribles consecuencias de
dicha separación: soledad, egoísmo, destrucción, sufrimiento, odio,
guerras, enemistades, etc. «Como está escrito: No hay justo, ni aun uno… No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno» (Romanos 3:10-12).
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La Biblia enseña: |
♦ EL PECADO TIENE CONSECUENCIAS ETERNAS ♦
«Los que no conocieron a Dios, ni obedecen al evangelio de nuestro
Señor Jesucristo… sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la
presencia del Señor» (2 Tesalonicenses 1:8,9).
El ser humano tiene una deuda contraída con Dios, y si no logra
saldar dicha deuda en esta vida presente, inevitablemente habrá de pagar
las consecuencias en la eternidad.
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La Biblia enseña: |
♦ LA SOLUCIÓN DE DIOS ♦
«Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito
(Jesucristo), para que todo aquel que cree en El, no se pierda, mas
tenga vida eterna» (Juan 3:16).
Dios vio al hombre perdido por la eternidad, y decidió Él mismo
hacerse humano como nosotros, pagando en calidad de hombre el precio de
nuestra desobediencia.
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La Biblia enseña: |
♦ JESUCRISTO MUERE POR NUESTROS PECADOS ♦
«Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros» (Romanos 5:8).
Jesucristo vino a este mundo para sufrir el castigo de nuestros
pecados, de tal manera que ya no tengamos que sufrirlo nosotros: un
verdadero acto de amor.
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La Biblia enseña: |
♦ JESUCRISTO NOS SALVA DEL PECADO Y DE LA CONDENACIÓN ♦
«He venido para buscar y salvar lo que se había perdido» (Lucas 19:10).
Jesucristo, como ser humano, murió por nosotros. Pero... también
resucitó al tercer día con poder y gloria. El Señor Jesús, no obstante,
sigue siendo Dios, el Salvador del mundo, y como tal hoy invita
personalmente a cada hombre y mujer para que acuda a Él: «Venid a mí todos» (Mateo 11:28).
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La Biblia enseña: |
♦ EL HOMBRE PUEDE RECONCILIARSE CON DIOS Y SER PERDONADO ♦
«Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma» (Isaías 55:3).
A través de Jesucristo hoy mismo Ud. puede reconciliarse con el
Creador, recibiendo así el perdón de sus pecados y la salvación eterna.
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Lo que Ud. debe hacer para ser salvo y obtener
la vida eterna:
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1º Reconozca su condición de pecador y arrepiéntase de sus pecados.
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«Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia,
ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan»
(Hechos 17:30).
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2º Crea que Jesucristo murió por Usted, pagando el precio de su desobediencia.
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«El que cree en el Hijo (Jesucristo) tiene vida eterna; pero el que
rehúsa creer en el Hijo nunca verá la vida, sino que la ira de Dios está
sobre él» (Juan 3:36).
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3º Acuda a Dios y pídale el perdón de sus pecados.
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«Todos los que en él (Jesucristo) creyeren recibirán el perdón de pecados por su nombre» (Hechos 10:43).
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4º Acepte, por la fe, el regalo de la vida eterna que Dios le ofrece.
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«La dádiva (el regalo) de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro» (Romanos 6:23).
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5º Reciba a Jesucristo en su corazón. Él es Dios y Salvador, y le está esperando para salvarle y hacerle un hijo suyo.
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«Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios» (Juan 1:12).
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La Oración de Fe
Esta oración se ha de hacer con toda sinceridad, dirigiéndose a Dios en un verdadero acto de fe:
Acudo
a ti Señor Jesús, confesando que soy pecador y que mis pecados me
alejan de tu presencia. Creo que eres el Hijo de Dios y que moriste por
mí en la Cruz. En estos momentos, arrepentido, te entrego mi corazón y
te recibo como mi Señor y Salvador. Perdona mis pecados y límpiame de
toda maldad. Acepto el regalo de la vida eterna que tú me ofreces.
Gracias por salvarme. Amén.
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